miércoles, 4 de junio de 2008

Me falta el adjetivo

Parece que la tendencia en las organizaciones es hacia organigramas más planos. Menos jerarquías, fuera jefes, más protagonismo de las personas. El modelo de gestión o la forma de funcionar de muchas empresas está cambiando en los últimos años, con casos paradigmáticos como el de Irizar de la mano de Koldo Saratxaga.

Lo cierto es que últimamente se escucha mucho eso del "modelo de gestión basado en las personas". No sé si más fruto de la influencia de casos de éxito como el anteriormente citado, de necesidades reales detectadas en la forma de funcionar de las organizaciones, o de un marketing interno disfrazado de bombero.

Modelo de gestión basado en las personas. Dicho así, entiendo que el modelo se sustenta en las personas. Me da igual que el nuevo modelo de gestión dibujado sea redondo, cuadrado o triangular; me da igual que sea rojo, verde o azul. Porque serán las actitudes y aptitudes de las personas que lo integran las que hagan que el nuevo modelo de gestión sea una rueda cuadrada o un cuadro redondo. Serán ellas, las protagonistas, las que hagan que el nuevo modelo de gestión se vista de un rojo pasión o de un verde militar.

Porque el nuevo modelo de gestión se basa en las personas. Pero... ¿qué tipo de personas? A mi me falta el adjetivo. Hablamos de...

- personas participativas-comprometidas-implicadas?
- personas rentables?
- personas con orientación al cliente? a los resultados? al trabajo en equipo? individualistas?
- personas creativas? soñadoras? alegres?
- personas pragmáticas? serias? trabajadoras?
- todo ello a la vez???

Diréis que cada persona es de su padre y de su madre. Que todos somos diferentes. Que en la diversidad está la riqueza. Claro. Pero... un "modelo de gestión basado en las personas" ¿no debería estar basado de un conjunto de personas con unas características y actitudes mínimamente comunes? ¿Algo que dé identidad o personalidad al conjunto?

Si la respuesta es que sí, a mi me falta el adjetivo: Modelo de gestión basado en personas... ¿qué tipo de personas?

Si la respuesta es que no, ilústreseme por favor.

5 comentarios:

manumanah dijo...

tres elementos, según mi experiencia en grupos empresariales, son cruciales a la hora de responder tus dudas:
-la existencia de una visión compartida (da igual cuál sea, pero que se comparta)
-la existencia de un liderazgo aceptado
-la comunicación y transparencia en la organización.

si logras estas tres premisas estarás en un modelo que gestiona no ya un grupo de personas, sino un equipo

Anónimo dijo...

Hablar de modelos es más fácil que hablar de personas...me temo. Ten en cuenta que si ponemos adjetivos, igual sobramos la mitad

Anónimo dijo...

Todos los modelos se basan en personas, hasta el dictatorial (uno ordena, el resto, obedece; éste sería el modelo basado en personas... obedientes ;-) ). Para mí el ideal sería Un Modelo Basado en Personas que Den lo Mejor de Ellas...

Anónimo dijo...

Me temo que, al hilo de lo que se comenta en un post reciente en el blog de Julen Iturbe, además de adjetivar a las personas habrá que adjetivar a la empresa también.

Me da en la nariz que a veces perdemos de vista el tipo de empresa (y por tanto de trabajo que va a desarrollar quien allí trabaje) cuando hablamos de estas cosas.

Y en mi opinión todo va de la mano. Porque mi motivación, mi compromiso (o más bien mi tipo de compromiso), mi relación con el resto de personas de la empresa y el resto de asuntos que van de la mano, no van a ser los mismos si sólo quiero trabajar 8 horas haciendo no sé que producto y conseguir el mayor sueldo posible por ese trabajo (una motivación tan legítima como cualquier otra, por cierto), que si soy un profesor universitario donde el conseguir logros académicos y el reconocimiento de la sociedad (por poner un ejemplo) es lo que me mueve.

Por tanto, creo que nos harían falta dos adjetivos (al menos): el de las personas, y el de la empresa.

Saludos. Iñaki.

Julen Iturbe-Ormaetxe dijo...

Se me coló por alguna esquina esta conversación. Siento participar tan tarde. Eso sí, yo cada vez creo que hay que mirar qué organización tenemos, qué tipo de empresa, porque no es oro todo lo que reluce y buscar personas participativas en una empresa que no lo merece es dar pan a quien le han arrancado los dientes.